Este equipo ha demostrado su dedicación y esfuerzo en enfrentar desafíos y encontrar soluciones innovadoras. La capacidad de pensar fuera de lo convencional, de trabajar juntos para superar obstáculos, es lo que nos distingue y ha llevado a este Ministerio a cumplir con las metas planteadas. Además, celebro la creatividad que cada uno de ustedes aporta a nuestra organización, misma que se ve hoy reflejada en cada uno de los árboles navideños que hoy decoran este salón.
Hoy, que organizaron este concurso de árboles, yo estoy feliz de que estemos juntos. Y quiero decirles que en esta mágica temporada de alegría y reflexión, me complace dirigirme a cada uno de ustedes para compartir algunos pensamientos sobre el significado profundo de la Navidad y expresar mi sincero agradecimiento por su trabajo a lo largo del año dentro de la institución.
Les deseo a cada uno de ustedes y a sus seres queridos, una Navidad llena de amor, paz y momentos maravillosos. Que esta temporada festiva nos llene de renovada energía y nos inspire a enfrentar el próximo año con optimismo y determinación. Me encuentro emocionada por las posibilidades que el próximo año nos brinda para seguir fortaleciendo el trabajo de este Ministerio y su beneficio en favor de la ciudadanía.
La Navidad, más allá de las luces centelleantes y los regalos brillantes, es un recordatorio de la importancia de la generosidad, la compasión y la unidad. Es un momento para mirar hacia atrás y apreciar los logros que hemos alcanzado a nivel personal, familiar y ministerial. Cada uno de ustedes ha desempeñado un papel vital en la consecución de los objetivos de la Cancillería, por tal motivo, quiero tomar un momento para reconocer y agradecer sinceramente el esfuerzo incansable que han demostrado durante 2023, que sin lugar a dudas, ha beneficiado a la población ecuatoriana.
Gracias por su arduo trabajo y dedicación. Que tengan unas felices fiestas y un próspero año nuevo.
Asimismo, en esta Navidad, quiero extender un saludo especial y fraterno a las familias de cada uno de ustedes. Sabemos que detrás de cada uno de nosotros hay un círculo valioso de seres queridos que comparten nuestras alegrías y desafíos y que nos ayudan a sobreponernos y alcanzar nuestros objetivos. Agradecemos a esas familias por su comprensión, paciencia y apoyo constante.
Nuevamente nos reúnen las luces que iluminan cada uno de nuestros caminos y, como les mencioné en el encendido del árbol que compartimos previamente, estas luces iluminan y deben iluminar también nuestro accionar en este Ministerio para aportar a un mejor país.
